Me quiero divorciar: primeros pasos para el divorcio.

Tu relación no da más de sí. Se acabó lo que se daba. Te quieres divorciar, pero te encuentras completamente bloqueada/o. Déjame que te cuente cuáles son los primeros pasos para el divorcio.

Primeros pasos para el divorcio.

1º-Asesoramiento

Imagínate que vas a jugar una partida de ajedrez, pero no sabes como se mueven las fichas. Te encontrarás inquieto, ¿verdad? Pues ahora suponte que en esa partida te estás jugando algo muy importante para ti. Sencillamente, estarás de los nervios… completamente bloqueado/a.

Pues eso mismo es lo que te está pasando ahora mismo a ti. Y la causa de los nervios no es que la relación de pareja se haya ido al traste (ojo, que no es plato de buen gusto, que tu proyecto personal no llegue a buen puerto). El verdadero motivo de tu ansiedad es otro: te estás jugando lo más importante (tu familia, tus niños) y no sabes cómo se mueven las piezas.

Por eso el primer paso tiene que ser el asesoramiento. Sentarse delante de un abogado y que este te explique con pelos y señales, cuáles son las opciones a seguir: custodia, alimentos, visitas, vivienda, tipos de divorcio, etc etc etc

Son muchos los clientes que, tras venir a mi despacho y explicarle «de qué va la película», se quedan muchísimo más tranquilos. Ojo, no siempre escuchas lo que quieres oír, pero ya sabes a qué atenerte, ya sabes las reglas del juego.

Y a partir de entonces toca pasar a la acción.

2º-Pasar a la acción.

En un divorcio hay una premisa básica: no hay tiempo que perder, por lo que toca, coger cuanto antes el toro por los cuernos, pasar a la acción.

Para eso, primero hay que tener claro cuáles son las pretensiones del cliente. Eso es lo que se habla en la fase previa (la del asesoramiento) Y una vez tenemos ese planning, toca poner en marcha la maquinaria.

Aquí se pueden dar dos situaciones. La primera, que los cónyuges, de motu propio, hayan llegado a un acuerdo en cuanto a cómo organizarse, en tanto en cuanto no se dicte una sentencia de divorcio. Imagínate, quizás él ha dado por bueno salir de casa e irse a un piso alquilado y mientras tanto pasa una pensión de alimentos. O que ella ha dado por buena una custodia compartida y cada uno os hacéis cargo de los gastos por mitad.

Pues si esta organización es beneficiosa para tus intereses (cosa que tendremos que ver en la fase de asesoramiento) pues no hay tanta prisa, pero siempre partiendo de la base de que lo mejor es que, más temprano que tarde, se refleje en una sentencia el acuerdo de las partes.

Pero si esa organización provisional perjudica tus intereses, o, directamente, ha sido imposible llegar a un acuerdo que ponga un poco de orden hasta el dictado de una sentencia, lo mejor, sin duda, es presentar una demanda de divorcio (o de medidas provisionalísimas) de manera inmediata. De esta manera se empiezan a sentar las bases de lo que pueda pasar en un futuro, atando todos los cabos que puedan estar sueltos.

Y con esto no quiero decir que ya te olvides de la opción de solucionar esto por las buenas. Para nada. Piensa que por mucho que presentes una demanda contenciosa, en cualquier momento se puede llegar a un acuerdo transformando el procedimiento en cuestión. Y ahí está la clave, que mientras la otra parte no quiera negociar, mientras la otra parte lo único que hace es echar balones fuera, yo no voy a perder el tiempo, que ya me sé de qué va la copla. Yo presento la demanda, y defiendo los intereses de mi cliente, sin perjuicio de estar abierto a cualquier llamada del contrario que permita reconducir la situación… Pero ya con los deberes hechos.

Que sabe más el diablo por viejo que por diablo. Y cuando te dedicas a esto sabes perfectamente cuando las negociaciones están en el típico tira y afloja en el que no se avanza nada y mientras tanto tu cliente viendo perjudicados sus intereses porque, por ejemplo, no pasa nada en concepto de alimentos o no te deja ver a los peques.

Antes de terminar, si quieres más información sobre los tipos de divorcio, pincha en esta entrada.

Conclusión.

1.-Si tu matrimonio hace aguas, lo normal es que estés de los nervios porque no sabes cuáles son los primeros pasos del divorcio.

2.-El primer paso es asesorarse con un abogado, saber las opciones que hay, cómo se mueven las fichas. Y a partir de ahí hacer un esquema de lo que se pretende en el divorcio.

3.-El segundo paso es pasar a la acción. Y no hay tiempo que perder. Se habla con la otra parte por si es posible alcanzar un acuerdo. Y si no hay posibilidad de una solución amistosa, toca presentar demanda.

Desde luego, te recomiendo que te asesores muy bien desde un primer momento. Son temas muy delicados que requieren la ayuda de un profesional con experiencia y empatía para entender tu situación. Si quieres que lleve tu caso, escríbeme.

Abogado especialista en Derecho de Familia.

Pablo Romero, autor de “la BIBLIOTECA de DERECHO DE FAMILIA”

Abogado en Granada.

Aclaración: en esta entrada hablo de los primeros pasos del divorcio por simplificar. Pero en realidad, estos pasos son los mismos para el caso de que no estuvieras casado/a.